martes, 23 de agosto de 2011

La NO-necesidad de actualizaciones constantes

Hoy quiero hablar de algo que aunque no es que me mosquee, si que me parece bastante estupido, y es la frecuencia de actualizaciones del navegador que uso, Firefox, y de otras aplicaciones.

Firefox hasta hace unos meses estaba en la versión 4 y a cada cambio que había de versión, la diferencia se notaba. Unas veces era la interfaz, otras veces el consumo de memoria, pero siempre se notaba alguna mejora.

Desde hace unos meses, han decidido seguir el ritmo de actualizaciones de Google Chrome (el navegador de Google, que yo no uso actualmente) y llevan ya dos cambios de versión sin prácticamente novedades. No se, ¿no sería mejor hacer una nueva versión cuando haya verdaderos cambios? Es que te pones la versión 5 y la 6 y no sabes cual es cual.

Luego están las aplicaciones que existen desde hace años y ni siquiera están en su versión 1.0. Por ejemplo, Miranda. Esta aplicación existe desde el año 2000 y se actualiza (pequeñas correcciones) cada dos o tres semanas, pero aun así sigue en su versión 0.9.17. ¿En serio? ¿Tienen miedo de hacer una 1.0?


La foto está sacada de Abadia Digital, un blog que leo regularmente.

2 comentarios:

Le Hamster Ruso dijo...

Firefox ha cambiado la forma de contar las versiones. De ahí que de la 4 a la 6 sólo haya pasado menos de un año y seguramente antes de que acabe estaremos en la 8.

No sirve de nada decir que no trae novedades grandes, sólo es una forma de gestionar bien los hitos de su proyecto ;)

ender dijo...

Ya se que es una forma de contar, pero es que yo preferiría que solo haya cambios de versión cuando realmente haya cambios importantes.